Homofobia en trance?

¿Homofobia en trance?
[15-05-2012]
Lucas Garve
Fundación por la Libertad de Expresión

(www.miscelaneasdecuba.net).- Este año la Jornada cubana contra la
Homofobia no contó con la concurrida asistencia de años anteriores. Esta
quinta edición tuvo más de discusión y promoción de salud que de
carnaval y festejo, aunque la música no faltó en el interior del
Pabellón Cuba situado en la céntrica calle 23.

Las entradas por la calle 21 y por N marcaron con más discreción el
acceso a diferencia de ediciones anteriores cuando abrían por la entrada
de la calle 23. Una nota que permite afirmar que hay cierta reticencia a
este tipo de eventos para quedar bien con críticas que las posiciones
heterosexuales hegemónicas aún imponen.


A pesar de lo anterior, es muy evidente que las masculinidades están en
transición en Cuba, al parejo del régimen que se maquilla con medidas de
reformas económicas, evade las políticas y se trasviste con promesas de
apertura que en realidad no cambian en algo la vida del cubano.

Este año, la Jornada ocurrió el sábado 12 y no el 17 de mayo Día Mundial
contra la Homofobia cuando se celebra en todo el mundo. Todavía el
desfile que cubre apenas dos cuadras de la intersección de 23 y Malecón
hasta N Y 21 no pasa de ser un apocado remedo
lamentable de las paradas de orgullo gay que se realizan en muchos países.

Pero para los jóvenes asistentes estas horas de socialización es una
manera de alcanzar la visibilidad de su orientación sexual, visibilidad
aceptada dentro del recinto del Pabellón Cuba y que les está negada el
resto de los días del año y limitada a mínimos espacios públicos para no
decir ninguno en la ciudad.

Aún hay miles de mujeres y hombres homosexuales que esconden su
verdadera orientación sexual e incluso quienes han llevado una vida de
acuerdo con su sexualidad y vivieron la época de intensa represión de
los años 60, 70 y 80 y se resisten a optar por una visibilidad que ahora
parece permitida.

Otro aspecto a tener en cuenta en estas Jornadas del CENESEX es la
ausencia de representación de de hombres y mujeres homosexuales y
lesbianas con nivel profesional que hayan alcanzado algún reconocimiento
social por su éxito competitivo, los que podrían servir de ejemplo a
estos más jóvenes que en muchos sentidos están desorientados por falta
de un sentido a sus vidas.

La tendencia de estas instituciones estatales y paraestatales está
signada por la promoción de salud. Si el Sida es una amenaza para los
grupos de HSH (Hombres que tienen sexo con Hombres); no deja tampoco de
ser una realidad que no todos los homosexuales padecen Sida y así como
no es cierto que el amor homosexual equivalga al Sida. Negar la calidad
de la capacidad de amar y ser amado entre seres del mismo sexo, esa es
una visión homofóbica también en mucho sentido.

Si se examinan verazmente los resultados de entrevistas con pacientes
que acuden a los centros de prevención y promoción de salud que atienden
estos casos se constatará que buena parte de los que acuden por ayuda de
salud son hombres a los que la tendencia homofóbica reinante obligó a
esconderse y tienen encuentros carnales ocasionales y empujados por el
apremiante deseo de satisfacer sus necesidades sexuales y otras también
económicas.

Todavía queda camino por recorrer hasta encontrar una solución adecuada
para que muchos aspectos de la sexualidad lleguen a dejar de ser tabúes
y la aceptación de la diversidad sexual sea una realidad en Cuba.
Mientras a pesar de las manipulaciones políticas se va gestando una
conciencia de diferencia que dará sus resultados en un futuro.

http://www.miscelaneasdecuba.net/web/article.asp?artID=35985