sábado, 12 de julio de 2014

El ejemplo, engendra ejemplos

El ejemplo, engendra ejemplos
[11-07-2014 10:21:06]
Mario José Delgado González
Periodista Independiente

(www.miscelaneasdecuba.net).- La violencia como efecto resultante de una
política económica arcaica, que afecta a su población sin márgenes de
ningún tipo, también afecta irrevocablemente a las minorías sexuales,
quienes tienen las mismas necesidades que la poblacion en general,
principalmente porque éstas con una identidad de género no reconocida
por la Asamblea Nacional, les excluyó del nuevo Código de Trabajo
Laboral puesto en vigencia el pasado mes de junio, no quedando otra
razón que vivir bajo la ignominia social y política, prostituyéndose en
las calles siendo víctimas de la agresividad o rebelándose practicándola
para poder subsistir.
No se puede negar que el estado de la misma más que ser un problema en
nuestro pais, resultado de políticas farduas y administraciones
económicas decadentes, forma ya parte de nuestra idiosincracia nacional,
afectando el estado de las relaciones psicosociales por culpa de no
dársele solución con estrategias pertinentes a los problemas que afectan
a la ciudadanía.

La violencia que es vista por nuestros funcionarios como una situación
de decadencia social, es hoy la manera cotidiana de vivir resultante,
tras el legado de la administración antecesora de Fidel Castro Ruz, del
cual hoy nuestro actual mandatario, "su hermano" recogiera los despojos.

La misma que se arrastra, de aquella política-económica, y que todos muy
bien la conocemos. Se expresa innegablemente en la escasez de viviendas,
el hambre, los injustos salarios a los trabajadores; ademas los altos
precios que circulan en nuestro país; cual subyacen en la mala decisión
tomada a raíz del triunfo revolucionario cuando aquellos que la
forjaron, escogieron por una política económica que nos llevaría a la
ruina es hoy un reto que el mismo gobierno pretende solucionar pero sin
que afecte su posición.

Para ser categórico, la misma (la violencia), podemos decir que es
resultado del egendro político-económico con que hemos sido educados
durante cincuenta y cinco años, y que enceguecidos no hemos actuado
contra ésta, por culpa de una política de miedo instaurada desde los
embriones y las sienes transmitito a todos aquellos nuestros primeros
padres que tras su cobardía se dejaron doblegar.

Por lo que hoy, podemos decir, que el indice exsacerbado de violencia,
expresado en robos, fraudes, asesinatos, extorcion, prostitucion y
chantajes cuales hablan por si solos, demuestran que la nacion pide
cambios y exige cambios antes de que esta caiga cuesta abajo resultado
de la obstinacion de los de arriba.

Sin embargo, y a pesar de los cambios cosméticos efectuados en estos
ultimos años y la transformación de la política económica que se está
implementando en el país a un ritmo considerablemente lento. La mayor
parte de la población junto con sus estudiosos que nada se atreven a
decir, saben que los mismos no efectuarán cambios considerables mientras
ésta no sea una de carácter abierto en beneficio de todos y a la vez sea
radical.

Ésta expresada en sus diferentes maneras, afectando innegablemente a la
ciudadanía de un país, subyace bajo el mismo estado de poder de una
dinastía que ha luchado de la manera más burda contra sus oponentes,
destacando sus virtudes antes que sus nefandas injusticias en pro de la
mera utopía de preservar el bienestar de una nación, conllevando a que
ésta sea educada en la misma violencia que sus dirigentes se han
empeñado en practicar a través de organizaciones de control social y
políticas creadas, y que descaradamente sentados tras buros y
organizadas reuniones se debaten en las mismas tratando de buscar una
solución, que perfectamente se conoce que no la tiene, porque para poder
exigir hay que actuar con el ejemplo y a la vez actuar consecuentemente
con ello.

A raíz de que en la década de los 90, según se publicó en el (Diario
rotativo) no se tienen datos precisos acerca del fenómeno de (la
violencia) y mucho menos de la violencia de género; el Centro Nacional
de Educación Sexual, el pasado mes, del 25 al 27 de junio, con el apoyo
de la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo
(AECID) y el Fondo de Población de Naciones Unidas (UNFPA), crearon la
red de investigadoras e investigadores en violencia durante su segunda
reunión.

En dicha reunión participaron profesionales de la salud, educación, la
academia del sector jurídico, los medios de comunicación, organizaciones
no gubernamentales y ámbitos comunitarios de diferentes regiones del
país, presentando la estrategias y experiencias relacionadas con la
violencia basada en género implementadas en el país por la PNUND,
UNICEF, UNFPA en el marco de cooperación internacional.

Entre sus fines se encuentran intercambiar estudios, información y
promover acciones para prevenir y atender el estado y la proliferación
creciente de la misma en Cuba.

Por lo que cabe destacar que en comparación al pasado siglo, (la
violencia) en todas sus manifestaciones se incrementó en todos los
ámbitos sociales, destacándose la de género, infantil y por razones de
orientaciones sexual e identidad de género, resultando en motivos
preocupantes para que nuestro país se dedicará a ahondar en estudios
sistemáticos al respecto.

La Psiquiatra Ada Alfonso, colaboradora del CENESEX, expresó: "Hablamos
de violencia en su sentido más amplio para invitar a quienes, desde
distintos espacios del país, acumulan experiencia y aportan conocimiento
para explicar y entender este problema".

Sin embargo, el problema, que es tan hondo que los mismos partidarios de
su estudio no se atreven a afrontar en los debates (porque les cuesta su
empleo, además de...), y es a saber- el estado de violencia ejecutada
por el gobierno y sus aparatos represivos contra el derecho nacional y
civil en cual tiene la culpa, no atreviéndose a reconocer;- mientras no
se le trate como el principal ente destructor de una sociedad y un país,
seguiremos en las mismas, sentados en los buros y organizando reuniones
infructuosas para darles solución, sin que se erradiquen o mengüen,
resultado de un extensivo y conciente trabajo a favor del progreso nacional.

A esto tenemos que añadir que las organizaciones de la sociedad civil,
junto con sus grupos y asociaciones independientes en sus diversas
características y objetivos, no reconocidas por el oficialismo como
propio a sus intereses; y quienes cada día se esfuerzan por transformar
nuestra humillante realidad, tienen el reto innegable de valentía y el
aval suficiente que les caracteriza, luchando pacíficamente contra la
violencia institucionalizada, para seguir marcando hitos en bienestar de
un país que parece totalmente destruido, pero no acabado.

Por lo demás hay que añadir que entre todas las violencias que se
evidencian en el país, sea por cuestiones de género, raza, orientacióon
sexual, identidad de género, de tipo regional, infantil, familiar y
laborales, que atentan contra el bienestar de la ciudadanía; de todas
ellas la peor es la violencia política de un régimen que instaurado en
el poder desde hace 55 años, se aprovecha de todas ellas para mantener
las mentes ocupadas en lo que no tienen que estar, y para sobre todo
lograr el malestar psicológico y físico de sus ciudadanos.

Mas como siempre se ha sabido, el ejemplo engendra ejemplos; y más
cuando se tienen responsabilidades.

Source: El ejemplo, engendra ejemplos - Misceláneas de Cuba -
http://www.miscelaneasdecuba.net/web/Article/Index/53bfd6b23a682e12d4c0ff7a#.U8EBUfmSwx4

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